Los síntomas de la prostatitis en los hombres

sintomas de prostatitis en hombres

La prostatitis es la patología urológica más común, que se caracteriza por un proceso inflamatorio en la glándula prostática. Según las estadísticas, ocurre en casi el 40% de los hombres, en el principal grupo de riesgo: pacientes de 30 a 45 años. Casi cada tercera visita a un urólogo está asociada con esta enfermedad.

¡Importante!

La información de este artículo no debe utilizarse para el autodiagnóstico o el autotratamiento. Para el correcto diagnóstico y tratamiento, siempre debe consultar a un médico.

La aparición de patología a menudo se ve facilitada por una disminución de la inmunidad, hipotermia, presencia de malos hábitos y un estilo de vida sedentario, falta de actividad sexual regular, infecciones sexuales. El tratamiento de la prostatitis puede ser bastante largo, especialmente en las últimas etapas de desarrollo. Cuanto antes un hombre busque ayuda médica, mayores serán las posibilidades de una recuperación exitosa. En ausencia de una terapia oportuna, aumenta el riesgo de consecuencias graves, que incluyen infertilidad, problemas con la función sexual y la micción.

En el artículo hablaremos sobre los mecanismos del desarrollo de la enfermedad, los síntomas y las causas, así como sobre los métodos modernos de tratamiento.

¿Qué es la próstata?

La próstata (o glándula prostática) es un órgano masculino impar que se encarga de producir secreciones para mantener la actividad espermática. El órgano está ubicado debajo de la vejiga y rodea la uretra. Es de tamaño pequeño, aproximadamente del tamaño de una nuez, pero es extremadamente importante para la salud de los hombres.

La glándula prostática apoya la producción de espermatozoides, asegura su movimiento y eyaculación, participa en la formación del deseo sexual y la aparición del orgasmo, afecta la actividad de los testículos y la síntesis de andrógenos (hormonas sexuales masculinas).

Cualquier proceso patológico en la próstata afecta la composición de la secreción prostática. Como resultado, la calidad del esperma se deteriora y su capacidad de fertilización disminuye. Además, aumenta el riesgo de infecciones del tracto urinario, ya que la glándula prostática normalmente evita que las bacterias entren en la uretra.

Desafortunadamente, las enfermedades que requieren tratamiento de la próstata son bastante comunes. Por lo general, estamos hablando de varios procesos tumorales y hormonales. La prostatitis se considera una de las patologías más comunes del órgano, ya que tiene una patogénesis diferente.

Síntomas de la enfermedad

Los síntomas de inflamación de la próstata pueden variar según la forma de la enfermedad diagnosticada en un hombre. Independientemente de la forma, se selecciona un tratamiento integral para eliminar los síntomas existentes.

Hay 3 grupos de síntomas característicos de la prostatitis:

  • síndrome de dolor. El dolor en la prostatitis puede ser diferente tanto en intensidad como en localización. A veces, el síndrome de dolor se propaga a la parte inferior del abdomen, el escroto, el perineo, el ano y la zona lumbar. Cuanta más inflamación se desarrolla, más dolor preocupa al paciente. El dolor puede volverse más intenso durante o después de la actividad sexual o la micción.
  • síndrome disúrico. Debido al aumento de tamaño de la próstata, aumenta la presión sobre los uréteres, lo que conduce a una disminución gradual de la luz. El paciente tiene problemas para orinar, mientras que después de ir al baño hay una sensación de vejiga llena.
  • Desviaciones sexuales. En algunos casos, un hombre puede experimentar frecuentes erecciones dolorosas espontáneas o una completa falta de excitación sexual. A menudo, con la prostatitis, las sensaciones orgásmicas se desvanecen y las relaciones sexuales en sí se vuelven cortas, o la erección puede desaparecer por completo durante las relaciones sexuales.

Uno de los primeros signos de prostatitis en un hombre es la micción frecuente y la incomodidad en el área de la ingle. Hay una sensación de ardor en la uretra, que se intensifica durante un viaje al baño. Hay fatiga general, disminución de la potencia, eyaculación acelerada o dolorosa. Sin embargo, la enfermedad no siempre se caracteriza por la aparición de síntomas apropiados. Hay formas de prostatitis que son asintomáticas en las primeras etapas. Esto significa que el diagnóstico de patología en tales casos será difícil.

Causas

A menudo, la enfermedad se presenta en el contexto de una disminución de la inmunidad, en presencia de infecciones sexuales o patologías concomitantes. Una causa común de prostatitis es una infección bacteriana, contra la cual comienza la inflamación de los tejidos de la glándula prostática.

Hay muchos factores de riesgo para el desarrollo de la patología, destacaremos los principales:

  • hipotermia. La hipotermia conduce a un estrés severo en el cuerpo, lo que puede provocar un debilitamiento del sistema inmunológico. Como resultado de esto, la microflora patógena comienza a multiplicarse activamente, lo que conduce a un proceso inflamatorio.
  • estilo de vida inactivo. El trabajo sedentario y la falta de actividad física afectan negativamente la circulación sanguínea de los órganos pélvicos. Esto conduce a la congestión y la inflamación.
  • Exceso de peso. Como regla general, los pacientes con sobrepeso llevan un estilo de vida inactivo, lo que conduce a una mala circulación sanguínea en los órganos internos. Se desarrollan procesos estancados e inflamación en los tejidos de la glándula prostática. Por esta razón, la normalización del peso se considera una de las principales formas de prevenir las enfermedades de la próstata.
  • La presencia de enfermedades crónicas.. Un foco de infección crónica en el organismo aumenta el riesgo de inflamación de la próstata.
  • Constipación crónica. La retención de las heces en el intestino provoca una presión sobre la próstata, lo que provoca trastornos circulatorios. Además, el estreñimiento a menudo contribuye a la reproducción de patógenos.
  • lesión de órganos. En caso de lesión traumática de la próstata o los órganos pélvicos, el flujo sanguíneo empeora y la inmunidad local disminuye. Esto aumenta el riesgo de desarrollar prostatitis.
  • Características de la actividad sexual.. La vida sexual excesivamente activa o la abstinencia prolongada también pueden provocar la aparición de la enfermedad.

Además, cualquier condición que deprima el sistema inmunológico puede contribuir al desarrollo de la enfermedad. Estamos hablando de estrés constante, falta de sueño, exceso de trabajo.

tipos de enfermedad

A menudo, los síntomas de la patología dependen de su tipo y naturaleza del curso. Existen varios tipos de prostatitis, cada uno de los cuales tiene sus propias características:

  • Bacteriano. El tipo más común de enfermedad que ocurre como resultado de una infección bacteriana y una disminución de la inmunidad. Hay formas agudas y crónicas de patología. Como regla general, un hombre está preocupado por el dolor y la incomodidad en el perineo, los trastornos de la micción, el deterioro del bienestar general y la fiebre. En casos severos, se nota la presencia de sangre o pus en la orina. Sin embargo, estos síntomas son más típicos de la etapa aguda y las recaídas de la enfermedad. En la prostatitis crónica, los síntomas pueden estar "difuminados" o no aparecer.
  • abacteriano. En este caso, la enfermedad es de naturaleza inflamatoria y no inflamatoria y, a menudo, se denomina síndrome de dolor pélvico crónico (SDPC). Con esta forma de prostatitis, se observan cambios destructivos en el tejido muscular de la glándula. Los patógenos son enfermedades autoinmunes, anomalías en el desarrollo del órgano, cistitis crónica.
  • estancado. Esta condición se desarrolla en el contexto de la prostatitis crónica y se asocia con una microcirculación y circulación sanguínea deficientes en los órganos pélvicos. Además, la patología puede manifestarse con una ausencia prolongada de relaciones sexuales, ya que esto provoca el estancamiento de las secreciones en la glándula prostática. Muy a menudo, los pacientes con esta forma de la enfermedad experimentan disfunción eréctil, problemas para orinar y molestias en el área de la ingle.
  • calculador. El desarrollo de esta forma de prostatitis contribuye a la aparición de cálculos (piedras) en los tejidos de la glándula prostática. Como regla general, la enfermedad ocurre en pacientes mayores de 55 a 60 años. Las causas de la patología son el tratamiento inadecuado de la prostatitis crónica o la urolitiasis. Los síntomas característicos de dicha prostatitis en los hombres incluyen dificultad para orinar, debilitamiento de la erección y aparición de sangre en la orina.
  • Purulento. Una consecuencia peligrosa del tratamiento inadecuado de la prostatitis aguda puede ser una forma purulenta de la enfermedad. En este caso, se desarrolla un síndrome de dolor agudo que afecta toda el área del perineo y la ingle. Un hombre tiene un fuerte aumento de la temperatura, problemas graves para orinar y la presencia de inclusiones purulentas en la orina. La prostatitis purulenta se considera la más peligrosa, ya que si no se trata puede causar un absceso y provocar la muerte.

Diagnóstico de prostatitis

El diagnóstico de la enfermedad lo realiza un urólogo; vale la pena programar una cita con él cuando aparezcan los síntomas característicos. Durante la consulta inicial, el especialista recopila el historial del paciente, pregunta sobre las quejas existentes y realiza un examen rectal de la glándula prostática. Después de eso, se prescriben una serie de exámenes adicionales, que son necesarios para diagnosticar el tipo existente de prostatitis y prescribir un tratamiento competente.

La encuesta incluye:

  • Ultrasonido (TRUS) de los órganos pélvicos.
  • Análisis de sangre clínico.
  • Análisis generales de orina.
  • Análisis microscópico de la secreción prostática.
  • Un hisopo de la uretra y una siembra bacteriana del secreto para la presencia de infecciones de transmisión sexual.

Si es necesario, el paciente puede ser derivado para estudios adicionales: espermograma, tomografía computarizada (o resonancia magnética) de los órganos pélvicos.

¡Importante!

La información de este artículo no debe utilizarse para el autodiagnóstico o el autotratamiento. Para el correcto diagnóstico y tratamiento, siempre debe consultar a un médico.

Métodos de tratamiento

La falta de un tratamiento adecuado de la prostatitis puede conducir a problemas de salud graves. A menudo, a los pacientes se les diagnostican complicaciones como cistitis, vesiculitis, pielonefritis, infertilidad y disfunción eréctil. Es por eso que la elección correcta de la terapia es extremadamente importante.

Como regla general, el tratamiento de la inflamación de la próstata implica un enfoque integrado, que incluye medicamentos y atención de apoyo. En casos difíciles, el paciente se somete a cirugía.

Como parte de la terapia con medicamentos, se prescriben antibióticos para detener el proceso inflamatorio. Si la enfermedad tiene una naturaleza infecciosa-bacteriana, entonces se lleva a cabo un tratamiento antibacteriano adicional.

Además, como parte de la terapia con medicamentos, los medicamentos se usan para eliminar los síntomas existentes. Puede ser:

  • Analgésicos.
  • Antiespasmódicos y relajantes musculares.
  • diuréticos.
  • Fármacos anti-inflamatorios no esteroideos.
  • Medicamentos para normalizar la función de la próstata.
  • Preparaciones para restaurar la erección.

Es obligatorio seguir una serie de recomendaciones:

  • Beber suficiente agua a lo largo del día (1, 5-2 litros).
  • Dieta, exclusión de la dieta de alimentos picantes, grasos y salados.
  • Exclusión de alcohol.

A veces, las preparaciones de hierbas medicinales se usan para aliviar la inflamación, que tienen un efecto bactericida. Sin embargo, la ingesta de infusiones y decocciones solo está permitida de acuerdo con el urólogo. Recuerde que los remedios caseros no son una panacea para la enfermedad y solo ayudan con los síntomas, pero no eliminan la causa.

Un componente importante del tratamiento es el masaje de próstata. Se realiza en ausencia de contraindicaciones. La esencia de este procedimiento es eliminar el secreto inflamatorio acumulado del cuerpo. Debido a esto, es posible mejorar la circulación sanguínea de los tejidos, eliminar la congestión, estimular la inmunidad local y restaurar la permeabilidad de los conductos secretores.

Otra forma popular es utilizar la fisioterapia. En el siglo XXI, es difícil imaginar un tratamiento moderno de alta calidad para la prostatitis crónica sin el uso de fisioterapia compleja. Con su ayuda, es posible restaurar la circulación sanguínea en los órganos pélvicos, mejorar el efecto de las drogas y eliminar la congestión. Como parte de la terapia, se utilizan efectos ultrasónicos, láser, térmicos o electromagnéticos.

Con un largo curso del proceso inflamatorio y una disminución de la inmunidad, al paciente se le prescribe inmunoterapia. Incluye tomar inmunomoduladores y complejos multivitamínicos destinados a mejorar las funciones protectoras del cuerpo y el bienestar general.

A veces, un régimen de tratamiento conservador para la prostatitis no produce los resultados deseados, por lo que el paciente necesita cirugía.

Por supuesto, la cirugía requiere una larga recuperación y, a menudo, provoca una serie de complicaciones, incluida la infertilidad. Por eso no se realiza en hombres jóvenes en edad fértil.

Síntomas y tratamiento de la prostatitis aguda.

La prostatitis aguda se caracteriza por un inicio y desarrollo rápidos. Vale la pena señalar que ocurre muy raramente, en aproximadamente el 5% de los casos.

El proceso inflamatorio en la glándula prostática se desarrolla progresivamente, por lo que se pueden distinguir varias etapas de la forma aguda:

  • catarral. El proceso inflamatorio afecta los lóbulos individuales del órgano, afecta la estructura de las membranas mucosas y la capa submucosa. Como resultado de esto, aparece una congestión en los folículos de la glándula.
  • folicular. Se produce supuración focal de los lóbulos afectados.
  • parenquimatoso. Hay una lesión múltiple del órgano, casi todos los tejidos están involucrados en el proceso inflamatorio. Se forma un absceso, que puede abrirse con la liberación de contenido purulento en la vejiga, la uretra o el recto.

Entre los síntomas de la prostatitis aguda: dolor intenso, fiebre, escalofríos, sudoración profusa, debilidad. Esta condición puede ser causada por varios microorganismos. La causa más común es Escherichia coli, Staphylococcus aureus, Pseudomonas aeruginosa, Enterobacter.

El tratamiento de la patología debe iniciarse inmediatamente después de que aparezcan los primeros síntomas. Como regla general, en tales casos es posible evitar complicaciones y consecuencias para la salud. El paciente recibe una combinación de antibióticos que es eficaz contra el patógeno existente. En este caso, el efecto de la terapia se observa después de 2-3 días. En un hombre, casi todos los síntomas desaparecen, el proceso de micción se normaliza y desaparecen los signos de infección.

En ausencia de la terapia necesaria, pueden desarrollarse obstrucción del tracto urinario y absceso. Tales condiciones requerirán hospitalización urgente y, a menudo, intervención quirúrgica.

Síntomas y tratamiento de la prostatitis crónica.

La forma crónica de la enfermedad se caracteriza por un desarrollo lento. Los síntomas son intermitentes o están ausentes, por lo que muchos hombres ignoran su presencia durante años y no buscan atención médica.

Al mismo tiempo, al comienzo del desarrollo de la patología, los pacientes notan un aumento del deseo sexual y erecciones espontáneas. Sin embargo, al mismo tiempo, tales signos de prostatitis crónica aparecen como una reducción en la duración de las relaciones sexuales y eyaculación dolorosa. A medida que avanza la enfermedad, los síntomas se vuelven menos pronunciados, pero aumenta el deterioro del bienestar. Muchos se quejan de la falta de erección matutina, disminución de la libido y aumento de la sudoración de la ingle.

Durante una exacerbación de la prostatitis en un hombre, hay dolor en el área genital, dificultad para orinar y fiebre. Sin embargo, otros síntomas de patología pueden estar ausentes, lo que a menudo complica el diagnóstico.

Un diagnóstico preciso requiere un examen completo, que incluirá una historia clínica, un examen rectal de la glándula prostática y una serie de pruebas de laboratorio. En algunos casos, se utilizan métodos instrumentales adicionales.

El tratamiento de la prostatitis crónica en la forma crónica toma de 3 a 4 semanas a 6 a 12 meses. De suma importancia es la eliminación de las causas del proceso inflamatorio en la glándula prostática. De lo contrario, no será posible excluir la naturaleza recurrente de la patología.

Medidas preventivas

Para la prevención de la prostatitis en los hombres se recomienda la corrección del estilo de vida y el rechazo de los malos hábitos. Esto se debe al hecho de que, mientras se mantengan los factores que favorecen el desarrollo de la enfermedad, es posible su recurrencia. La nutrición adecuada, el buen sueño y la actividad física, la vida sexual regular juegan un papel clave en la prevención.

Además, los urólogos aconsejan seguir las siguientes recomendaciones para no encontrar inflamación de la glándula prostática:

  • Evite la hipotermia.
  • Cuando trabaje sedentario, tome descansos breves regulares y haga ejercicio ligero.
  • Incorpora el ejercicio y las caminatas a tu rutina.
  • Normalice la nutrición y elimine el estreñimiento (es mejor consultar a un especialista sobre el problema).
  • Tener una vida sexual regular con una pareja regular.
  • A partir de los 40 años, revisiones preventivas anuales por urólogo.

Y, por supuesto, vale la pena recordar que si aparece algún signo de prostatitis, debe consultar a un médico de inmediato. Esta es la única forma de evitar consecuencias peligrosas para la salud.